Equipos de época – Pentacampeones del mundo, Brasil 2002

Hoy en equipos de época, la única escuadra pentacampeona del mundo, Brasil 2002.

Después de quedar subcampeón en el mundial de Francia 98’, el seleccionado brasileño llegaba al mundial de Corea/Japón plagado de estrellas y con ganas de revancha. La ‘Canarinha’ (apodo del seleccionado brasileño) que había perdido el pulso frente a la escuadra Francesa -con un Zinedine Zidane iluminado- arribaba en el continente asiático como una de las grandes favoritas a llevarse el título.

Dirigidos por Luiz Felipe Scolari; Marcos, Roberto Carlos, Lúcio, Cafú, Gilberto Silva, Kaká, Ronaldinho, Rivaldo, Ronaldo y muchas estrellas más conformaban aquel seleccionado que pondría a rodar el Fevernova (balón oficial del mundial Corea/Japón 2002) al ritmo de la samba.

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A pesar de que Brasil terminaba como tercero (por debajo de Argentina y Ecuador) en la tabla de eliminatorias al mundial del 2002, su participación en el torneo de fútbol con mayor prestigio era bastante esperada por los amantes del balompié, pues la ‘Verdeamarela’ (apodo del seleccionado brasileño) intentaría conseguir aquel Pentacampeonato tan anhelado.

Sin embargo, Brasil primero tendría que superar el Grupo C que compartía con Turquía, China y Costa Rica. En su debut contra la selección turca, Hasan Şaş se encargó de poner el 1-0 en el marcador en el tiempo de descuento de la primera parte; un tanto que le caía como un baldazo de agua fría a los dirigidos por Scolari.

Aun así, Brasil supo reponerse después del entretiempo, y Ronaldo, que no convertía un gol oficial con la ‘Canarinha’ hace más de dos años debido a sus lesiones, mandaba a guardar aquella bocha dentro de los tres palos. Claro, después de marcar ese tanto, Brasil salió a comerse viva a Turquía en lo que restaba del encuentro. A falta de tres minutos para el final el árbitro le regalaría un penal a Brasil y Rivaldo no desaprovecharía la oportunidad.

Con un 2-1 final y con bastante polémica, Brasil conseguía sus primeros tres puntos en la Copa del Mundo ganándole con lo justo al seleccionado turco. Aun así, en la segunda fecha, sacaría a la luz todo ese fútbol que le faltó en su debut. 

Con goles de Roberto Carlos, Rivaldo, Ronaldinho y Ronaldo, la ‘Verdeamarela’ goleaba a China 4-0 y aseguraba su cupo en la siguiente fase del mundial. Eso sí, primero tendrían que jugar su último partido de la fase de grupos frente a Costa Rica para intentar mantener su invicto en el certamen.

A pesar de tener su clasificación asegurada para los octavos de final, el seleccionado brasileño no quería dejar ningún punto en el camino, y Costa Rica no sería un problema, pues antes de los 15 minutos Ronaldo había marcado un doblete para los suyos. Faltando poco para el final de la primera parte, Edmílson anotó el 3-0, pero un minuto más tarde Wanchope descontaría para los ticos.

Costa Rica, que se estaba jugando su pase a la siguiente fase, arrancó la segunda parte en busca de la remontada y al minuto 56, Rónald Gómez anotaría el 3-2 que los hacía soñar. Sin embargo, Rivaldo acabaría con sus esperanzas al minuto 62 y tiempo después, Junior anotaría el 5-2 final que daba por terminado el mundial del seleccionado tico y que a su vez, aseguraba el puntaje perfecto de la ‘Canarinha’, tres jugados y tres ganados.

Que comience el Mundial

El seleccionado belga, que había pasado como segundo del Grupo H, sería el rival de Brasil en los octavos de final; eliminación directa, un nuevo comienzo para todos los equipos que compartían el mismo objetivo, levantar la copa del mundo.

Tras un inicio intenso, ambas selecciones empezaban a crear oportunidades de gol que les dieran rápidamente la ventaja, pero las dos escuadras, se mantenían sólidas en la zaga defensiva y no regalaban espacios. Tras un primer tiempo parejo, Bélgica salió en busca de la victoria y los dirigidos por Scolari se mantenían vivos gracias a las grandes intervenciones del guardameta Marcos.

Brasil resistía a los ataques de los europeos, y al minuto 67, Ronaldinho le metía un gran pase de tres dedos a Rivaldo, que con categoría, bajaba de pecho la esférica y desenfundaba un disparo potente imposible para el golero belga.

La escuadra Sudamericana se adelantaba en el marcador gracias a la calidad de sus jugadores y a tres minutos para el final, sentenciaría el partido con un gol de Ronaldo Nazario.

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La ‘Verdeamarela’ obtenía su tiquete para los cuartos de final, en los cuales se jugaría una final anticipada. Los creadores del juego Vs los dueños del juego, la mejor defensa del campeonato Vs el mejor ataque del campeonato, Brasil Vs Inglaterra. Beckham, Ronaldo, Owen, Rivaldo, Scholes, Ronaldinho, Campbell y Cafú, eran algunas de las estrellas que se reunirían en el rectángulo verde para entregarle a los aficionados un verdadero espectáculo.

El Estadio Ecopa de Shizuoka recibía a más de 47 mil espectadores ansiosos de ver buen fútbol. El ímpetu y el rigor empezaron a notarse en el campo de juego, pues ninguno de los 22 jugadores esperaba darle ventaja a sus rivales, pero Lúcio, al minuto 23 cometía una macana que dejaba a Owen solo delante del portero, y claro, el delantero inglés aprovecharía el regalito y adelantaría a los ingleses con sutileza.

Ya con la ventaja, a Inglaterra le quedaba hacer lo que mejor se le daba, defender, y a los dirigidos por Scolari les costaba bastante adentrarse en el área de los europeos. Sin embargo, Ronaldinho, aquel chico de 22 añitos que militaba en el PSG y al cual llamaban ‘El Mago’, emprendió una carrera desde el medio campo, hizo una bicicleta que dejó a Ashley Cole loco y le metió un pase quirúrgico a Rivaldo, el cual definió con elegancia al segundo palo. Todo el banquillo de Brasil se volvía loco con el gol del delantero del Barcelona, pues ambas escuadras se iban al descanso igualadas en el marcador.

Ronaldinho se había cargado a todo un país en su espalda y aún le faltaba mucho más por demostrar; como si fuera poco, en un tiro libre que parecía iba a ser un centro, ‘El Mago’, con astucia disparó y clavó el balón en el ángulo, imposible de atajar para David Seaman que lo único que le quedaba era admirar lo que Ronaldinho había hecho.

Claro y las vueltas que da la vida, y el fútbol, la figura del partido salía expulsada de la cancha. Ronaldinho entraba tarde y le pegaba una fuerte patada a Danny Mills, y el árbitro sin pensarlo, le sacaba la tarjeta roja.

Brasil, con 10 hombres, tenía que mantener el resultado si esperaba pasar a las semifinales; con categoría y garra, Cafú, Lúcio y Gilberto Silva aguantaban los ataques de los ingleses y dejaban a una de las candidatas fuera de la copa del mundo. Los de Scolari habían sido superiores y conseguían su tiquete para la siguiente fase en la cual se enfrentarían a un viejo conocido, Turquía.

Lo único que separaba a Brasil de la anhelada final era Turquía, que venía de eliminar a Japón y a Senegal, y esperaba hacer historia eliminando a la ‘Canarinha’.

Los europeos se mantenían vivos gracias a Rüştü Reçber. El guardameta turco, sacaba todos los disparos de Brasil, pero al minuto 49, le fue imposible contener un disparo de Ronaldo Nazario. Turquía no logró remontar el marcador y Brasil por tercer año consecutivo, se metía en la final de la Copa Mundial de la FIFA, en esta ocasión frente a Alemania.

La consagración de ‘El Fenómeno’

Cuatro años atrás, en la final contra Francia, Ronaldo no llegó en las mejores condiciones, pues una noche antes del partido sufrió convulsiones y no pudo demostrar su máximo nivel. Durante esos cuatro años, las lesiones se adueñaron de él, y se dudaba que llegara en buen estado físico y mental al mundial.

Ya en el mundial, la prensa señalaba que Ronaldo -a pesar de ser el goleador- todavía tenía secuelas de las lesiones, y no tenía las mejores actuaciones. ‘El Fenómeno’ (apodo de Ronaldo) decidió realizarse un corte de pelo particular para que los medios de comunicación y las personas que lo criticaban hablaran de su peinado y no de su juego, y de esta manera poder concentrarse cien porciento en el campeonato.

La final enfrentaba al mejor guardameta del campeonato (Oliver Kahn) y al mejor delantero (Ronaldo), y en los primeros minutos del encuentro tendrían su primer duelo cuando un remate del brasileño pasaba rozando el poste del arco defendido por el alemán.

Brasil cada vez se acercaba más al arco de Alemania y empezaba a generar varias ocaciones de peligro. Al término de la primera parte, Kahn le volvía a ganar un duelo mano a mano a Ronaldo y el golero se empezaba a convertir en figura.

Sin embargo, al minuto 66, Ronaldo recuperó la esférica fuera del área de Alemania y se la cedió a Rivaldo, el cual sin pensarlo desató un disparo potente que parecía controlado por el portero alemán; aun así, 70 mil espectadores presentes en el Estadio Internacional, Yokohama vieron cómo la pelota se le escapó de las manos y Ronaldo como buen ‘9’ cazó el rebote y abrió el marcador para la ‘Verdeamarela’.

Después de un partido más que destacado, un error le costaba bastante caro al portero alemán y le daba la ventaja a la escuadra brasileña.

Los dirigidos por Scolari se empezaban a adueñar del juego y a 11 minutos para el final, Kléberson le cedía la pelota a Rivaldo y él sin pensarlo la dejaba pasar entre sus piernas para que Ronaldo quedara solo delante del arco. ‘El Fenómeno’ con una definición mágica, dejaba al guardameta sin chances de agarrar el Fevernova y marcaba el 2-0 que sentenciaba a los alemanes.

Ronaldo abría sus brazos delante de todo el estadio, que se rendía a sus pies, pues no solo se había convertido en el goleador del torneo (con 8 tantos) sino que le entregaba a Brasil su quinta Copa del Mundo.

Cafú, levantaba aquella copa al cielo de Asia y señalaba que Brasil, de nuevo, estaba en lo más alto del fútbol mundial. Aquella escuadra rodeada de estrellas se convirtió en un equipo de época, que llevó la samba a otro continente y se proclamó pentacampeona del mundo.

Por Julián Pino Cruz