Equipos de época – El cuento de hadas del Blackburn Rovers 1994-95

Blackburn Rovers

Hoy en equipos de época, la sorprendente conquista del equipo de la Rosa, el Blackburn Rovers 1994-95.

Desde su creación, la Premier League se ha caracterizado por el dominio que ejercen los clubes con más poderío deportivo y económico sobre los más humildes, hecho que se refleja en que en casi treinta años de historia tan solo siete equipos se han quedado con la corona del fútbol inglés.

Sin embargo, cada cierto tiempo se escriben ‘cuentos de hadas’ que llenan a esta competencia de una mística especial, como sucedió con el Blackburn Rovers en 1994-95, cuando dio la sorpresa y se llevó el título de aquella temporada, acabando con la hegemonía que Liverpool y Manchester United mantenían en la época.

El Blackburn Rovers, fundado en 1875 y natural de la pequeña ciudad de Blackburn de no más de cien mil habitantes, es uno de los clubes más tradicionales de Gran Bretaña, puesto que fue uno de los ‘fundadores’ de la Football League en 1889, además de que lleva consigo un gran número de seguidores. No obstante, no es un conjunto habitualmente ganador, más bien es de momentos en los que ha adornado sus vitrinas con algunas copas o ligas, siendo uno de los más recordados el de la década de 1990, cuando llegaron a la cima de la pirámide del balompié anglosajón.

El músculo financiero del Blackburn Rovers

Antes de hablar de los míticos logros que alcanzaron en esta etapa, tenemos que remontarnos al nombre de Jack Walker, un ferviente fanático de los Riversiders que con su empresa ‘Walkersteel’ amasó una fortuna en la industria del acero que puso a disposición de su amado equipo a través de la compra de un gran porcentaje de su propiedad.

Walker, que asumió el control total del club en 1991, realizó diversas transformaciones destinadas a la conformación de un proyecto deportivo muy ambicioso, empezando con una remodelación de su estadio, el Ewood Park, para alcanzar las 30.000 localidades de aforo.

Al inicio de la temporada 91/92, cuando la escuadra del condado de Lancashire se encontraba en segunda división, el empresario le otorgó el cargo de director técnico a la leyenda Red Kenny Dalglish, que cumplió con el objetivo del ascenso tras terminar la fase regular en la sexta casilla y vencer por la vía del play-off al Leicester City, otro singular campeón de Premier muchos años después.

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El regreso del equipo de la Rosa

Luego de 26 años de ausencia de los Rovers en la élite del fútbol británico, su regreso se produjo en la que fue la primera temporada de la Premier League, un torneo impulsado por los clubes más importantes de Inglaterra que significó una reestructuración a gran escala basada en una ruptura con el sistema de ligas de la EFL (English Football League).

La irrupción del Blackburn Rovers en la temporada 92/93 fue notable a la vez que inesperada dado que alcanzaron el cuarto puesto con 71 puntos de la mano de la joven promesa Alan Shearer que fichó por la cifra récord (para aquel tiempo) de 3,5 millones de libras procedente del Southampton.

Esa deslumbrante campaña no fue un espejismo, empero fue el primer aviso que los Blue and Whites hicieron en relación a lo que llegaría en las temporadas posteriores. De este modo, en la 93/94 sumaron fichas importantes como David Batty o Tim Flowers y no solo mantuvieron su estado de forma, sino que subieron posiciones en la tabla y finalizaron como segundos, accediendo a la anhelada Copa de Europa.

La temporada de la consagración

La temporada 94/95 era una muy esperanzadora para la escuadra blanquiazul y la ilusión se acrecentó incluso más con la contratación del atacante Chris Sutton que nuevamente batía el récord de transferencia por la suma de 5 millones de libras.

Con Sutton en sus filas, el Blackburn tenía en él y en Shearer una dupla de ataque temible que durante la temporada alcanzó la cifra de 49 goles, 34 de ellos, obra del más sólido Alan Shearer, que jugó todos los partidos de liga, un dato relevante teniendo en cuenta que en diciembre de 1992 sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior en su rodilla izquierda.

Pero la importancia y el desequilibrio de la anterior asociación conocida como ‘The Sas’, no puede nublar a todo el equipo dirigido por el ícono escocés Kenny Dalglish, que se supo reponer a las dolorosas caídas tempraneras en Copa de la UEFA ante el Trelleborgs sueco, en FA Cup contra el Newcastle y en Copa de la liga a manos del Liverpool. Lo que los obligaba a focalizarse en su liga local.

En el marco de un sistema de 4 – 4 – 2, Tim Flowers se encontraba bajo los tres palos y normalmente eran inicialistas de izquierda a derecha y de defensa a ataque: Graeme Le Saux, Colin Hendry, Ian Pearce, Henning Berg; Jason Wilcox, el capitán Tim Sherwood, Mark Atkins, Stuart Ripley; Alan Shearer y Chris Sutton.

Haciendo honor al lema de su escudo: “Arte et Labore” (“Por la habilidad y trabajo duro”) el Blackburn Rovers aguantó la presión y mantuvo la primera plaza desde la decimosexta jornada hasta la última, en medio de la exigencia que representaban las 42 fechas de fútbol inglés a su máximo nivel. Sin embargo, en las dos ocasiones en las que se enfrentó a su escolta, el Manchester United de Sir Alex Ferguson, ganador de las últimas dos ediciones de Premier, cayó derrotado, lo que dejó una jornada final de película pues solo los separaban dos puntos.

El 14 de mayo de 1995 es una fecha escrita en letras doradas en la historia de los Rovers. Desembarcaban en Anfield para medirse ante el Liverpool, mientras los Red Devils visitaban Upton Park para verse las caras con el West Ham United. Al Manchester United solo le servía la victoria y dependían de que el equipo de la Rosa no ganara al Liverpool, recordando que si quedaban en igualdad de puntaje los dirigidos por Ferguson se llevarían el trofeo a casa gracias a su mayor diferencia de gol.

El escenario, que no hacía mucho era la casa de Kenny Dalglish, estaba servido para un vibrante encuentro. Y a pesar de que un resultado favorable para los Reds agrandara las posibilidades de una nueva liga para sus acérrimos rivales, necesitaban de él para poder contender en Europa en la temporada venidera.

El nerviosismo de los de Blackburn recaía sobre sus temblorosas piernas y el resultado final del cotejo fue de 2 a 1 en contra, haciendo muy latente el riesgo de que todo su esfuerzo y sus expectativas cayeran por la borda. Pero, por suerte, el duelo en Londres entre los Hammers y el Manchester United terminó en empate a un tanto, que se tradujo en los titulares que decían: ¡EL BLACKBURN ROVERS ES CAMPEÓN DE LA PREMIER LEAGUE!

El declive de los Blackburn Rovers

Por desgracia, los siguientes periodos en Premier fueron menos memorables y muchas de sus piezas importantes como Dalglish y Shearer abandonaron el barco, culminando con un descenso a Championship en 1999.

En el 2000 la ‘primavera de Walker’ llegó definitivamente a su fin con el fallecimiento del ‘Tío Jack’, a quien dedicaron el ascenso del 2001 y la consecución de la Copa de la Liga del 2002.

El club se sumió en un notorio declive desde 2010 con la aparición de los Venky, sus actuales propietarios indios, en el que se vieron relegados hasta tercera división y aunque al momento de hoy se encuentran luchando por la promoción de regreso a Premier, las últimas dos décadas han sido de bastante sufrimiento para los aficionados Rovers que han visto como sus gloriosos días en los 90 se han quedado allí, en el recuerdo y en la lejanía de su historia llena de misticismo y tradición.

Por: Zamoel Guzmán