Cambio necesario en el sistema de descenso en el Fútbol Profesional Colombiano
Son 16 los equipos que buscan ascender a la primera división del Fútbol Profesional Colombiano. Durante un año procuran ser el primero en la reclasificación, ganar la gran final del torneo de ascenso o buscar una tercera posibilidad quedando a la espera de los resultados de otros equipos.
Aquellos que logran el tan preciado ascenso llegan a disputar una categoría muy diferente y en desigualdad de condiciones. Los problemas van desde lo económico hasta lo futbolístico, pasando por la ausencia de hinchada en muchos de los oncenos.
El reciente caso del descenso de Tigres Fútbol Club, evidencia que la lucha de todo un año puede ser efímera y desmoronarse en un tiempo similar. Tigres volvió a la B el año siguiente, 2017, sin contar con mayores oportunidades.
En la Liga 2017-I, Tigres ocupó el puesto número 18 y en el 2017-II, terminó en la posición 12. Poco a poco, iba ascendiendo en la tabla, pero su promedio no le permitió mantener la categoría a pesar de que peleó el ingreso a los ocho finalistas.
Si bien el sistema por promedio permite medir el desempeño del equipo de forma global, un equipo que arranca con un promedio bajo y asume un proceso en una nueva categoría tiene menos oportunidades frente a los que están continuamente en la A.
Este sistema por promedio no les exige una regularidad a los equipos; por ejemplo, Rionegro Águilas hizo una aceptable campaña en la primera liga del 2017 quedando en el puesto 14, para la liga del segundo semestre el equipo antioqueño quedó de último en la tabla ocupado la posición 20.
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La desigualdad del Fútbol Profesional Colombiano
En la tabla de descenso Rionegro terminó bastante lejos de Tigres con un promedio de 1.275, mientras el equipo recién ascendido cerró con un promedio de 1.017. En el global del año, sumando los puntos conseguidos por los equipos en la Liga I y la II, los números serían los siguiente:
Equipo | Puntos acumulados en el 2017 |
Tigres | 45 |
Rionegro Águilas | 39 |
Por posición en la tabla y por acumulado del año, entre estos dos equipos que he tomado como ejemplo para esta columna, el llamado a descender sería el Rionegro Águilas. Pero, el actual sistema del fútbol colombiano determina que el que debe volver a la B es Tigres. Esto sin olvidar otros candidatos como Bucaramanga, Jaguares o el otro descendido Cortuluá.
Es necesario cambiar el sistema de descenso, establecer que los números se den con respecto al año, incorporar el descenso directo al último de la tabla o establecer un mecanismo que brinde una igualdad de opciones. Asimismo, se debería retomar la idea de la posibilidad de un tercer cupo para el ascenso en donde se juegue un partido entre un tercer equipo de la A y otro de la B en donde disputen un cupo más en la primera categoría.
Estos cambios deben darse para mejorar las condiciones de igualdad de los equipos y mejorar el nivel del Fútbol Profesional Colombiano, haciendo más competitivo ambas categorías.
Por Álvaro Rodríguez Hernández
Posdata: Quiero agradecer a todos los lectores por acompañarnos, no solo en esta columna sino por haber tomado como alternativa de información a POLIDEPORTES. En el 2018 seguiremos entregando todo nuestro esfuerzo profesional para brindarles información deportiva completa y de calidad. Para ustedes unas felices y deportivas fiestas de fin de año y que llegue pronto el 2018 porque son muchos los compromisos deportivos que viviremos. Esta columna volverá el próximo 11 de enero.