La historia de Wilson Méndez, más de 20 años para cumplir un sueño
Wilson Méndez es un empresario que a lo largo de su vida ha tenido más dificultades que victorias, pero debido a las mismas ha logrado salir adelante, es padre de Violeta una pequeña de 3 años. Su pasión por la velocidad y la adrenalina lo han llevado a países que jamás pensó visitar; sin embargo, fueron uno de sus grandes momentos que lo llevaron a donde está hoy.
Desde pequeño veía las carreras de Fórmula 1, en su cumpleaños pidió de regalo ir a los karts y desde ese momento supo a lo que se quería dedicar. Los sueldos de sus primeros trabajos, en parques de diversiones, los ahorraba para ir a los karts por horas.
Con mucho orgullo cuenta cómo fue su inicio frente a quien es hoy en día. Su padre, Ramón Méndez Jiménez, fue de gran ayuda durante su carrera, aunque él no estaba de acuerdo con el camino que tomaba.
Empezó con los karts desde pequeño, Wilson Méndez o Wili para sus amigos y familia, tenía un sueño, su padre lo apoyó económicamente hasta el primer semestre de la universidad, hoy es su patrocinador en las 6 horas de Bogotá.
El paso de Wilson Méndez por las academias, cursos y una carrera universitaria
Su padre, Ramón Méndez Jiménez, contaba con un buen puesto en el mundo de las Finanzas y los negocios, por lo que siempre anheló que su hijo siguiera sus pasos, pero al salir del colegio Wilson no podía entrar a la universidad por el servicio militar, su caso aún no se resolvía y por eso tomó otra opción.
Wilson se fue un año a estudiar inglés a Estados Unidos, mientras su situación se podía resolverse. En su estadía conoció a muchos latinos, entonces su nivel de inglés era bajo al no practicarlo como se debía. Un amigo muy cercano le pidió un favor y esto cambió su situación.
Le pidieron que llevara una caja a una familia en Colombia, cuando Wilson la entregó, conoció a una persona que trabajaba en el ejército y esta a su vez conocía a alguien que le podía ayudar. Pago su libreta y soluciono su situación militar, ¿ahora qué seguía?
Wilson compró un carro con el dinero que traía de Estados Unidos y lo usaba para ir a piques ilegales, “cuando eso eran algo sano”, afirma.
Iba en compañía de un amigo y fue cuando decidió hacerlo bien, inicio en una escuela de carreras llamada Skip Barber, al terminarla pasó a un técnico en automotriz en una academia, era muy bueno en la física por lo que se le facilitó. Al terminar pasó a la universidad a estudiar ingeniería mecánica, pero, aunque las matemáticas y la física van de la mano, para Wilson eso no era así.
Perdió el primer semestre y su padre le dijo: “Tiene una última oportunidad para volver a la universidad, si pierde alguna materia mire a vercomo le hace”. Al ver que la ingeniería no era lo suyo, vio conveniencia en la administración de empresas, las finanzas y la bolsa de valores.
Wilson Méndez consigue su licencia para ser piloto de automovilismo deportivo
Antes de crear su empresa pasó por muchas otras cosas que lo iban acercando, poco a poco, al camino que siempre había querido tomar, estuvo en varios trabajos después de graduarse y simplemente no era lo suyo.
Wilson tomó la decisión de vender algunas cosas y empacar otras cosas, se fue para Nueva Zelanda. Finalmente, aprendió a hablar inglés, y encontró una nueva pasión por el medio ambiente y la descontaminación de aguas.
Al regresar a Colombia creo una agencia de viajes, por su previa experiencia, pero no funcionó. Luego de esto vendría una nueva oportunidad de la mano de esposa, en aquel momento su novia, Angélica Aguirre, pero esta vez no no era en Colombia.
Posteriormente, se trasladó a Panamá allí conoció a su actual socio, él cuál le propuso hacer una empresa de mantenimiento y construcción para los sitios que él construía. Actualmente, son una empresa muy exitosa con inversiones en Colombia.
Con su empresa creada y una vida estable, hizo todas las vueltas para entrar al mundo del automovilismo sacando una licencia especial para conducir en este tipo de deportes de alto riesgo otorgada por la Federación Internacional del Automóvil (FIA), compró un vehículo, lo terminó de adecuar y empezó su carrera.
Ante las dificultades para encontrar recursos de otras marcas, su éxito empresarial le ha permitido convertirse en su propio patrocinador, sin depender de otras negociaciones.
Su primera carrera
Su primera experiencia como piloto fue en Panamá, durante la clasificación de la carrera todo iba bien, aunque era su primera vez en esa pista, la temperatura y condiciones de carrera no eran favorables y seguras, en ese momento no contaba con camión de bomberos o ambulancia.
Al comenzar, la carrera fue fluyendo y Wilson creía que lo había logrado, conforme iba marcando más vueltas, el carro se iba recalentando, pero el se negaba a entrar a boxes ya que era un problema que se presentaba en curvas, en las rectas ya no marcaba las altas temperaturas.
En la última oportunidad para entrar a boxes se salió de pista y quedó atrapado en el pasto no pudo sacar su carro, la temperatura volvió a subir y el carro se incendió. Otro piloto vino con su extintor e intentaron apagar el carro, pero este fue consumido por las llamas en menos de diez minutos.
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Las seis horas de Bogotá
“Vi que en Panamá no tenia lo necesario, no me hacia sentir seguro y perseguí otro de mis grandes sueños, correr en Colombia”, enfatiza Wilson.
En Colombia se Corre El Campeonato Nacional de Automovilismo en el que compiten seis categorías: Fuerza Libre (FL) con 2.001 cc en adelante, Prototipo (P1) hasta 1.340 cc motores de motocicleta, Gran Turismo (GT) GT de 2.500 cc en adelante, Turbo Turismo (TT) Turboturismos hasta 1.600 cc, Súper Turismo (ST2) hasta 2.000 cc, Super Turismo (ST1) hasta 1.600 cc. Son seis carreras en el año y Wilson ha corrido en la categoría ST1 desde hace tres años.
En años anteriores fue al autódromo en donde se juega el Gran Premio de Fórmula 1 de Países Bajos y sacó permisos para correr en autos de lujo. En este 2024 el campeonato empieza el 23 de marzo y Wilson se prepara para conseguir su podio en el escalón más alto, su padre, Ramón Méndez, al ver que su hijo por fin lo logró se siente orgulloso y va a apoyarlo a todas sus carreras.