Las sombras de la soberana del tenis
La llegada del Australian Open en su categoría Gran Slam, ha dejado en esta edición 109 grandes encuentros, de los cuales han sido protagonistas los mejores tenistas del mundo, incluida la soberana del tenis, enfrentando a las promesas del tenis mundial.
Asimismo ha dado oportunidad de conocer grandes figuras quienes en su mejor versión, se han enfrentado a los reyes de esta disciplina, mostrándose ágiles y fuertes en cada “Revés” y “Drive” que disparan.
Serena Williams, la soberana del tenis, una de las mejores atletas del mundo ha mantenido sus habilidades con la raqueta, su posición física de defensa, y su destreza en conseguir puntos en golpes de servicio (ACES) tan impredecible, que aun con 39 años demuestra su posición “The Best Player” en la cancha.
Sin embargo, para esta tenista estadunidense su batalla para clasificarse para los cuartos de final en esta primera categoría del Gran Slam, no fue fácil al imponerse a rivales cuyas habilidades y características físicas son espejo inherente a la soberana del tenis.
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Anastasiya Potapova gran rival para la soberana del tenis
La tenista rusa de 19 años, Anastasiya Potapova fue una de las rivales amateurs más difíciles en el camino de Serena en su paso a la siguiente ronda. La joven promesa del tenis mundial, aunque dio un bueno juego en su primer set, al conseguir un “Tiebreack” de 5-7, no superó la experiencia de su oponente Williams, quien la batió en dos set (6-7- 6-2) .
Por otra parte, el encuentro entre estas dos damas del tenis, se convirtió en una batalla de talentos; Asimismo la tenacidad a manos de Anastasiya reflejó la similitud de juego de la soberana del tenis de dos décadas antes.
En el año 2001 cuando Serena tenía 19 años, logró dar un buen espectáculo en la semifinal del “Us Open” ante la Eslovena Martina Hingis, finalista en la primera categoría del Gran Slam ante Jennifer Capriati ( Número uno en ese entonces). Los dos SET conseguidos por Serena ( 3-6 – 2-6) no solo fueron evidencia de su buena relación con la pelota y la raqueta, sino su inteligencia y habilidad para derrotar a quien la arrasó en ese mismo año en una semifinal del Australian Open.
Aryna Sabalenka: el difícil sendero a cuartos de final
Por otro lado, otra de las grandes rivales a enfrentar camino a los cuartos de final del Australian Open, fue la tenista bielorrusa Aryna Sabalenka, hoy número nueve en el ranking mundial de tenis individual y segunda en versión dobles.
Esta tenista de 1,82 metros de altura, se impulsó ante una Serena Williams confiada en cada uno de sus servicios, desequilibrando su posición defensiva y mostrando su habilidad de golpe a revés para llevarse el primer set del encuentro (6-4).
Sin embargo, sus gritos de lucha en cada tiro cruzado de Williams, y su agilidad en responder tan difíciles misiles, permitió sellar el segundo set con una ventaja de 6-2 a favor de la bielorrusa.
Los últimos juegos que definirían la ganadora de esta batalla, sería uno de los sets más emocionantes y valiosos de todo el encuentro. El esfuerzo físico y mental fueron los elementos claves que mantuvieron fríos estas dos grandes deportistas, para conseguir la satisfacción del juego y pasar a la siguiente ronda.
Como si se tratase de una final en uno de los torneos internacionales más importantes del mundo, el sacrificio corporal que estas dos guerreas del tenis demostraron, permitió ofrecer un espectáculo nutrido de experiencia y de madures al final del encuentro.
La sucesora Naomi Osaka
El paso a la final del torneo del Gran Slam entre la tenista japonesa Naomi Osaka y Serena Willimas, fue uno de los encuentros más esperados, y que más ruido dio en la cancha. Después de levantar el toque de queda en el estado de Victoria, los seguidores y familiares de estas reinas del tenis, incorporaron un escenario campal, donde ambas demostraron ser las soberanas de la pelota y la raqueta.
Aunque este encuentro solo se fue a dos sets ganados por la japonesa 6-3 6-4, dejó ver y admirar a una Osaka dispuesta a derrota a su mentora Serena, y una leyenda del tenis preparada de bajar su raqueta y decir adiós a una semifinal del Abierto de Australia.
